1 A la pregunta del título podemos responder con un fragmento del (falso) manifiesto que se utiliza en la ficción serial 'El pasajero separado', y que también coexiste como obra literaria, con sus reglas y dinámicas propias.
E Espero que os resulte de interés como un nuevo capítulo de iniciación en el universo "pasajero".
1 La vida
no se comprende, y existe una alta probabilidad de que no haga ninguna falta.
- - ¿Cómo
ordenar algo que no se comprende? Ésa no es una pregunta que nos hagamos con la
suficiente regularidad.
- - De asumir
la incomprensión absoluta, vine el cuestionamiento de la idea de ‘orden’. Los
pasajeros separados sólo intentan ser el mínimo orden necesario.
2 Es característico de lo vivo el querer
permanecer vivo durante el mayor tiempo posible, siempre y cuando haya salud y
buena compañía.
- - Huir cuando el clima es desfavorable, mantenerse
cerca de la fuente de alimento. Eso es ‘orden’.
Una serie de repeticiones que aseguren el desarrollo biológico del
cuerpo.
- - Lo opuesto a ese orden no es necesariamente un
caos. Es una voluntad de no existir, una voluntad de desprenderse de un cuerpo.
3 La oposición entre orden y caos es un circo de
valores añadidos. Lo que entendemos hoy en día por orden es caos encubierto.
Caos es el conjunto de creencias que legitiman el uso del dinero.
- - El dinero y el culto a la palabra son
prácticamente lo mismo. Las épocas anteriores al dinero debieron ser muy
silenciosas.
- - Los pasajeros separados entienden que el orden
actual es una ficción serial acomodada a un repertorio de gags idénticos los
unos de los otros. Su lenguaje es un arresto de los sentidos. Su valor es el
del dinero: imaginario, nulo.
4 El dinero es muy digestivo. Se lo dan a los
bebés desde muy pequeños para activar la parte más triste y resentida de sus
cerebros.
- - Ten mucho dinero siempre. Eso es un vale para
todo. De no ser tan frecuente la confusión entre felicidad e impunidad, el
dinero sería un magnífico billete hacia la felicidad.
- - La felicidad está sobrevalorada. La gente de
verdad no quiere ser feliz. A esa gente el dinero se le derrite en las manos.
5 Todos nacemos con un plato de comida delante.
Los cubiertos los pone la empresa.
- - La gran empresa es la que da afectos, castos o
de los otros. La gran empresa sólo espera amor de nosotros. Nosotros nunca
estaremos a la altura de las perspectivas amorosas de la gran empresa.
- - La gran empresa destina parte de su fondo social
a la construcción de eco-aldeas en la sierra de Gredos, un aplauso para la gran
empresa.
6 De la sensación de esperar algo específico de la
vida es de lo que se nutre el DES-ORDEN actual. Y el no tan actual. La historia
humana tal vez sea la historia de la expectativa a jornada completa.
- - Si la vida es ráfagas de deseo entre intervalos
de sueño, normal que haya obsesión con la idea de ‘felicidad’ y, por tanto, una
larga nómina de infelices, de muertos en vida, el tipo de gente que vemos todos
los días y que nos reafirman en esa opinión estupenda que tenemos de nosotros
mismos.
- - De la vida no se puede decir que sea mala o
absurda por defecto. De la vida, sólo se puede decir que ES, como de los
hombres y de las mujeres sólo se puede decir que SON.
7 La vida es cuestión de óptica. Lo que nos sucede
y lo que no nos sucede es opinable y entra en el campo de la especulación.
- - La muerte es opinable también. Porque vamos a
ver… ¿la muerte de qué? Un cuerpo queda tendido en el suelo como el pellejo de
una fruta. ¿Qué termina exactamente con la muerte del cuerpo? ¿Qué no empezará?
- - Los pasajeros separados son un nuevo diluvio
sobre una escenografía gastada. No existe lo irreversiblemente estéril.
8 Nada define mejor la vida que la violencia. La
vida es un tránsito violento. Somos pasajeros con destino al horror y a la
muerte.
- - La violencia es energía sin cauce, sin
propósito. Es llegar al océano por un atajo, despreciando la comunión con el
río principal.
- - El uso de la violencia es opinable. Inadmisible
en tanto que inútil. Inevitable por lo que tiene de manifestación de lo vivo,
en contraste con la dulce perfección de lo muerto, lo que ya solamente ES.
9 Los violentos tienen una inclinación ciertamente
poética. El arte y la manifestación violenta son sendas apologías del cambio, o
lo que es lo mismo, berrinches.
- - Ni artistas ni terroristas son ejemplos de
clarividencia.
- - Sólo del rechazo al diálogo y al intercambio
nace lo que algunos llaman iluminación, que no es más que un recuerdo del
estímulo inicial, y alcanzarlo no supone transmitirlo, con lo que se trata de
un viaje individual, al margen del bien común.
1 0 La revolución no es el arte, la gran novela o
ensayo de cada siglo, la música, el manifiesto de turno cercado por las mismas
estructuras de poder.
- - La revolución no es el acto violento e
inevitable con el que se justificaban Mao Tse Tung y Sergio Leone.
- - La única revolución posible no tiene rostro,
sólo hace lo que hace la naturaleza, se abandona a pudrirse por sí solo, una
respiración al fin consciente de sí misma.
1 1 El que
busca un sentido acaba excavándolo. Y así es que acaba dando con el hueso. Pero
el hueso no es alma, es hueso, y con el tiempo, polvo.
- - Al que busca más le vale conformarse con la
propia búsqueda, porque el milagro nacerá ante sus ojos y no lo verá. Los
milagros operarían, entonces, del mismo modo que crecen las plantas.
Invisibles. Implacables.
- - Alimentarse de la tierra y velar por ella, para
cualquier pasajero separado esto es lo único absolutamente necesario.
1 2 Todos somos pasajeros separados, desde el
momento mismo en que nos metemos la herencia cultural en la boca y la mordemos.
A partir de ese momento, ya sólo somos diferencia. Cada órgano de nuestro
cuerpo, un ente adjetivable.
- - En algunas cuevas de algunas montañas se celebra
todavía el conocimiento del asombro. De adorar un icono, ése sería la mirada
vacía de un bebé.
- - Si queremos ser tan perfectos como un bebé,
tenemos que volver al útero. Y al útero no hace falta ir bien vestido ni
oliendo a desodorante. El pasajero separado es un ser desnudo que da y recibe
en un acto reflejo.
13 Para crear algo nuevo no hace falta romper algo
viejo. Es suficiente con olvidarlo.
- - Uno no acaba nunca de entrenarse lo suficiente
en el difícil arte de recordar lo útil, lo imperecedero, lo que no se sabía que
se sabía.
- - En medio de impulsos esquizoides y ritmos
aberrantes, una voluntad de vivir. El mejor dispositivo de destrucción y
reciclado de las pieles muertas.
1 4 Necesitamos… Respirar y alimentarnos.
Ensuciarnos las manos y preservar un surco de actividad en la palma o en el
dorso o en las uñas, un recordatorio gozoso de nuestro paso por este lado del
espejo.
- - Necesitamos… Sembrar y cosechar de acuerdo a los
ciclos naturales y no a los imperativos financieros. Beber mucha agua.
Aprovechar bien las ocasiones puntuales que nos brinde la vida de entablar una
relación saludable con todo aquello que no podemos ver, lo que para algunos
será algo parecido al rezo, y para otros al sueño, y para la mayoría al éxtasis
o al delirio.
- - Necesitamos… Amar y educar, acaso la misma cosa,
y tal vez la tarea más difícil y específica del ser humano. Aprender.
Descansar. Escuchar el sonido de lo que se va y de lo que permanece.
1 5 No necesitamos… Que instituciones muertas y
tubos de escape nos digan lo que tenemos que hacer, con qué margen de maniobra,
cómo cuándo dónde. No necesitamos palabras, sobre todo las que no sirven para
nada, empezando por éstas mismas.
- - No necesitamos… Relaciones de dependencia que
surgen a imitación de conceptos de clase y jerarquías de poder. No necesitamos
familias que retribuyan su afecto como una empresa líder en su sector escupiría
un salario mínimo.
- - No necesitamos… imágenes prefabricadas,
hipervínculos y redes sociales, los aleluyas hipócritas del estado del
Bienestar, el arte, la eyaculación diaria, la palmadita en la espalda, todo
aquello que nos dé la impresión de que la vida nos debe algo.
16 Los pasajeros separados no son eremitas en su
burbuja de arrobo y bienestar. Viven al margen de lo que no quieren legitimar,
se auto-abastecen, se esfuerzan por guardar un cierto nivel de coherencia entre
palabra y acción, por eso hablan poco, y por eso acaban designando el mundo
mediante gruñidos.
- - Los pasajeros separados mantienen relaciones
afectivas abiertas. No se tratan entre sí como mercancías ni ponen precio a sus
atributos. No son fieles o infieles, guapos o feos, no hacen costumbrismo de
sus entregas y desencuentros.
- - Los pasajeros separados influyen o no en la medida
en que todo acto repercute necesariamente en los demás. La resistencia es
lucha, la voluntad de no legitimar es insurgencia, el sacrificio es el cinturón
de las herramientas.
1 7 Búscalos en los sanatorios mentales y en los
despojos de la industria seca.
- - En todas las familias hay uno, o una. Un rebaño
de ovejas negras acaba destacando sobre la meseta.
- - Están, principalmente, en la naturaleza. Están,
principalmente, en los lugares físicos y mentales que todavía no han sido
domesticados.
18 Las posibilidades son infinitas cuando hay solo
una identidad real.
- - Cuando asumo que yo soy sólo un conjunto de
opiniones, ¿qué es lo que no podría ser, entonces?, ¿en qué no me puedo
convertir?, ¿a qué rincones del conocimiento no puedo acceder?, ¿de qué no iba
a ser capaz?
- - Las posibilidades son infinitas cuando hay solo
una identidad real. Todos uno.
1 9 Un pasajero preguntó, Maestro, ¿qué es la
verdad?, y el Maestro le respondió, ¿quién eres tú?
- - El pasajero dijo, yo soy Ismael. A lo que el
Maestro añadió, YO SOY es la verdad, ISMAEL es la mentira.
- - Todos uno.
2 0 La vida tiene en el cuerpo su órgano receptor.
- - El cuerpo soporta un repertorio limitado de
dolores y placeres.
- - Por malo que sea, alegrémonos. Sólo estamos aquí
de paso.